El COVID 19 y el impacto en el turismo
Uno de los sectores más impactados por el COVID-19 en términos económicos y sociales es el turismo. La movilidad se ha parado a su mínima expresión y la maquinaria del turismo por consiguiente. Millones de dólares y cientos de miles de empleos se han perdido en los meses que lleva la pandemia. Por otro lado, el aspecto ambiental que sustenta el turismo, ha tenido un respiro inesperado reflejado en cielos despejados o apariciones de especies silvestres en zonas urbanas.
Para la Organización Mundial del Turismo, en adelante OMT, el COVID-19 ha impactado el turismo de una manera nunca antes vista y estima el impacto negativo en cerca de 45 mil millones de dólares como cifra preliminar, y por ello conmina a los países miembros a poner en el centro de la crisis a las personas más vulnerables, a la gente pobre, a las mujeres, a los empleados vinculados al turismo, a los jóvenes, a las comunidades campesinas y rurales, que suman millones y son el motor de este sector.
Es difícil imaginar lo que significan 45 mil millones de dólares. Por ejemplo, en el primer trimestre del año las llegadas de turistas internacionales se redujeron 22%, indica el informe de la OMT, que habla de "la peor crisis" desde que se iniciaron los registros, en 1950. El volumen de turistas internacionales podría caer entre 60 y 80% en 2020, a causa de la pandemia de coronavirus y las restricciones de movimientos en todo el planeta, anunció la OMT.
En 2019 visitaron México 44.7 millones de turistas extranjeros y la captación de divisas por este concepto ascendió a 24 mil 800 millones de dólares, un poco más de la mitad del impacto de pérdidas estimadas hasta ahora por COVID-19.
De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), los impactos a corto plazo se verán en mayor desempleo, menores salarios e ingresos, aumento de la pobreza y la pobreza extrema, sistemas de salud: mayores costos, fragmentación y desigualdades de acceso; y en el mediano y largo plazos la quiebras de empresas, la reducción de la inversión privada, menor crecimiento económico, menor integración en cadenas de valor, deterioro de las capacidades productivas y del capital humano.
Si bien todas las empresas, independientemente de su tamaño, se ven afectadas, en particular en los sectores de la aviación, el turismo y de servicios como el comercio, desde años anteriores ya enfrentaban una importante disminución de sus ingresos, el aumento de la insolvencia y la pérdida de puestos de trabajo en sectores específicos, lo que tendrá un marcado impacto en el mercado laboral. El mantenimiento de operaciones será especialmente difícil para las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) (OIT, 2020).
En este contexto económico complejo y desafiante, donde el turismo enfrentará retos nuevos después del COVID-19, se prevé una caída de los ingresos por turismo de entre 10% a 20% en 2020, una reducción del PIB de 0,3 a 0,8 puntos en México y los efectos se sentirán en particular en las micro y pequeñas empresas, cuyo peso en el sector de hoteles y restaurantes es enorme. Uno de cada diez empleos a nivel mundial se dan en el sector turismo.
El impacto final del COVID-19 en el turismo dependerá de las repercusiones de las acciones sanitarias y socioeconómicas en los países y regiones de los que proceden la mayoría de los visitantes. Por ejemplo, para México es clave la recuperación de la economía de los EUA y Canadá, que representan el principal mercado para el turismo internacional de México.
La recuperación del turismo frente a esta crisis plantea la necesidad de buscar nuevas formas de hacer turismo; encontrar alternativas innovadoras y mercados regionales fuertes, por ejemplo. El turismo debe acompañarse de políticas públicas de fomento y diversificación; fortalecer a los grupos más vulnerables y valorar y proteger la base del turismo, es decir, la naturaleza y sus servicios ambientales.
La solución para el turismo dependerá, en primera instancia, de la contención del virus de manera coordinada entre todos los sectores. Representa también una oportunidad para buscar un turismo sustentable en los económico, social y ambiental.